El contacto con los jóvenes que asisten a nuestros Centros Educativos, permite descubrir que hay en ellos, inquietudes y necesidades que requieren espacios para la expresión de aquellas y satisfacción de éstas. Entre inquietudes que con frecuencia manifiestan, pueden señalarse el deseo de servir y de comprometerse con causas nobles. Sin embargo, este anhelo de compromiso parece ser más bien de corto plazo, pues, por otro lado, se observar en ellas/os escasa valoración o miedo ante compromisos permanentes o de largo plazo. Entre las necesidades juveniles que requieren atención, son especialmente espacios de encuentro e intercambio que den cauce a necesidades afectivas. Las condiciones actuales de inseguridad han creado a otra necesidad, pues han recortado los espacios para la convivencia y esparcimientos sanos.
La formación integral de las/os jóvenes requiere el aprovechamiento y la creación de todos los espacios y oportunidades posibles que favorezcan una relación educador - educando, que se prolongue más allá del aula. Por tanto, no puede reducirse a la actividad y tiempo académicos.
El Modelo Educativo Mínimo, enfatiza la formación en y para el servicio. Y no obstante que los jóvenes de la actual generación muestran consistentemente su inclinación hacia la solidaridad, no todos ellos encuentran las motivaciones suficientes para cumplir responsablemente las normas de Servicio Social establecidas en los Centros Educativos. Es por tanto necesario, brindar motivaciones que permitan encontrar sentido a las horas de servicio que le son requeridas.
Por el énfasis que la Pastoral Juvenil pone en la solidaridad y el servicio y por los espacios para la reflexión y el discernimiento que crea, la atención pastoral de los jóvenes es campo fértil para el florecimiento de las vocaciones consagradas al servicio.
Las anteriores consideraciones sobre la realidad juvenil ponen de manifiesto la urgente necesidad de contar en la Congregación con un movimiento que integre las iniciativas locales de Pastoral Juvenil y las extienda a todos los Centros >Educativos Mínimos, como medio de favorecer el sentido de identidad entre las/os jóvenes que ayudamos a formar.